Asociaciones público-privadas
De más en más, las APP son la clave de proyectos de
infraestructura en países en desarrollo. Se reconoce la
participación del sector privado en el diseño, la financiación y la
realización de proyectos de infraestructura como medio de reducir
la gran brecha existente entre las necesidades de infraestructura y
los escasos recursos de inversión con que cuentan los gobiernos
para suplirlas.
Por lo que atañe al comercio, la infraestructura no sólo
comprende carreteras, ferrocarriles, puertos, energía, agua y
telecomunicaciones, sino también laboratorios de calidad, controles
sanitarios y fitosanitarios, y verificación del cumplimiento de las
normas en puestos fronterizos, así como computadoras y programas de
informática para aduanas.
En muchos casos, los gobiernos consideran el uso de APP en la
infraestructura como una opción económica más efectiva y
sostenible, en particular, aquellos que intentan abordar carencias
de infraestructura o mejorar la eficiencia de sus
organizaciones.
Asegurar la sostenibilidad de las asociaciones exige
competencias sofisticadas para evaluar intereses que compiten entre
sí y negociar acuerdos pragmáticos. A pesar de los beneficios,
muchos países siguen teniendo reticencias y son cautelosos en
cuanto a la intervención de APP por varios motivos. El sector
privado puede mostrarse temeroso de lo que percibe como un riesgo
asociado a la reglamentación siempre cambiante del gobierno y con
frecuencia, cada parte es recelosa de las intensiones de la otra.
Así pues, el reto estriba en conciencias sobre los beneficios de
tales proyectos, granjearse la confianza de todas las partes
interesadas, incluida la sociedad civil, establecer un marco
regulador que sea adecuado y crear un modelo empresarial que pueda
financiarse. Por último, para que el sector privado mantenga su
empeño en una iniciativa de APP, es preciso presentar resultados
tangibles en un plazo razonable. Visto que los horizontes
temporales del sector privado suelen ser cortos y su enfoque
orientarse más a los resultados, los programas y proyectos de Ayuda
para el Comercio han de diseñarse y llevarse a cabo de una manera
más compatible con las empresas.
Defensa de la empresaAdemás, a fin de correlacionar la política de comercio del
Estado y sus efectos en el entorno empresarial del país, la defensa
de la empresa reviste singular importancia. El diálogo
empresa-gobierno es importante porque no se trata de obtener
únicamente ganancias del comercio sino también el bienestar social
y la redistribución de ingresos entre productores, consumidores y
gobierno. Aquellos gobiernos que prestan atención al sector privado
tienen más probabilidades de idear reformas fiables y factibles que
permitan a los empresarios (entre ellos los que participan en APP)
comprender lo que se está tratando de lograr para que acepten y
apoyen el programa en cuestión.
Establecer vínculos comerciales entre grandes y PYME es la clave
para que las empresas locales puedan impulsar su competitividad e
incorporarse en la cadena de suministro global. Esto radica
principalmente en que consigan lo que necesitan, cosa que en muchos
casos no pueden hacer por sí solas, entre otros, acceso a mercados
internacionales, financiación, tecnología, competencias de gestión
y conocimientos especializados. El ámbito de esta cadena comprende
vínculos de concatenación regresiva con proveedores y asociados
tecnológicos, vínculos de concatenación progresiva con clientes y
otros efectos concomitantes.
Los vínculos de concatenación regresiva se dan cuando grandes
empresas compran partes, componentes, materiales y servicios de
proveedores locales estableciendo relaciones inmediatas de
transacción, o bien, una estrecha cooperación entre empresas, según
el tipo de prestaciones que ofrecen las empresas locales.
Establecer vínculos de concatenación regresiva promueve la base
industrial del país en cuestión reforzando a los proveedores
locales y vitalizando la inversión exterior.
Muchos países en desarrollo se beneficiaron de programas de
vinculación positiva, pero para otros la evidencia de los vínculos
de inversión interna fue negativa. Los principales motivos
invocados por inversores extranjeros para justificar la baja
proporción de compras a proveedores locales incluyen la inquietud
de que los bienes y servicios suministrados no respondan a sus
exigencias en términos de calidad, precio y plazos de entrega.
Desde el punto de vista del inversor extranjero, se suele
considerar que los proveedores locales son insensibles a las
solicitudes de que mejoren la calidad, los precios y los plazos
entrega.
Para llegar a los mercados regionales y globales, las PYME deben
establecer cadenas de suministro fiables, lo que implica habérselas
con una logística compleja en múltiples sectores para cumplir las
normas internacionales. A algunas PYME, sobre todo aquellas que
luchan por cumplir con las exigencias de mercado, les puede
resultar difícil acceder a mercados regionales y más aún a los
globales. Algunas dificultades con que tropiezan las PYME obedecen
a sus necesidades en materia de:
- inteligencia comercial y capacitación que les
permitan identificar segmentos de mercado para sus productos y
servicios;
- asistencia en la construcción de una logística de
exportación que facilite vínculos entre productores y grandes
exportadores a través de las cadenas de valor;
- capacitación para cumplir con las normas de calidad,
las exigencias de envasado y los procedimientos aduaneros;
- asistencia y capacitación para elaborar planes
empresariales a largo plazo que incluyan la mejora, la innovación y
la diversificación de productos y
- acceso al crédito y otros mecanismos de financiación
a largo plazo.
Las grandes empresas pueden ayudar a superar estas barreras al
comercio y servir de canales para que los pequeños productores
exporten sus bienes y servicios. También pueden ayudarles a
reforzar su productividad y la calidad de sus productos mediante
programas de formación, disposiciones contractuales y apoyo en
marketing global. Por ejemplo, Remei AG, empresa textil, estableció
una cadena integrada de producción textil forjando alianzas con
cultivadores de algodón de Tanzanía e India, utilizando una red de
empresas de hilado y tratamiento que abarca muchos países y
vendiendo a través de Coop, cadena minorista de Suiza.
A fin de reforzar ese tipo de relaciones se pueden construir
iniciativas de Ayuda para el Comercio que ayuden a proveedores
locales a alcanzar niveles más altos que les confieran fiabilidad.
Gobiernos locales y organismos donantes internacionales pueden
desempeñar un papel importante en facilitar programas de
vinculación comercial, sobre todo allí donde el sector privado no
puede hacerlo por sí solo. Su participación es particularmente
necesaria en lo que respecta a sensibilizar, obtener el compromiso
de otros asociados clave y coordinar a otras partes interesadas.
Una reglamentación minuciosamente diseñada también puede
ayudar.
Visto que la mayoría de los programas de vinculación se van
desarrollando con el correr del tiempo para responder a las
condiciones cambiantes del mercado, la continuidad del éxito de la
iniciativa Ayuda para el Comercio exige que tanto los gobiernos
como el sector privado revisen con frecuencia el programa de
vinculación y comprueben si los procedimientos siguen siendo
pertinentes y eficaces. En algunos casos, esto último traerá
aparejadas importantes modificaciones de los principios del
programa.
Empresa y responsabilidad social
empresarialA través de estratégicos programas de RSE, las grandes empresas
desempeñan un papel importante en la labor con PYME de países en
desarrollo que forman parte de sus cadenas de suministro. En los
últimos años, militantes, sindicatos, medios de prensa e incluso
accionistas ejercieron presiones en dichas empresas para que
consideraran más que antes las consecuencias de sus actividades. A
modo de respuesta, empresas multinacionales y grandes empresas
locales proceden a incorporar programas de RSE para abordar
necesidades concretas; también están empezando a aplicar medidas en
la materia a través de los sistemas de gestión y a percatarse de
que conciliar el respeto por el medio ambiente, la igualdad social
y la rentabilidad financiera es bueno para la empresa. Ya no es
suficiente que las grandes empresas consideren sus actividades de
inversión y creación de empleo como reembolso satisfactorio para el
país que las acoge.
A pesar de los pasos positivos que se dieron, el potencial de
conjugar intereses sociales y comerciales dista de haberse
realizado. Tal como se dice en el Informe del PNUD, El impulso del
empresariado: "La mayor parte de los esfuerzos se concentraron en
modelos tradicionales de carácter filantrópico o benéfico:
construir escuelas y centros sanitarios, o colaborar con
organizaciones culturales y artísticas. Aunque valioso y tal vez
necesario, este modelo es más un escaparate que una contribución
sustanciosa o sostenible a las vidas de los pobres. Puesto que es
ajeno al modelo de negocio tradicional, los beneficios se miden en
valores intangibles -como la reputación, la reducción de riesgos o
la autorización para operar- y no en la triple cuenta de
resultados. Equivale a contribuciones financieras a corto plazo, no
cuantificables y no justificables. Y los compromisos pueden ser tan
perecederos como los cambios en la gestión o el clima
empresarial."
El reto para gobiernos y organizaciones internacionales,
motivado por la Ayuda para el Comercio, estriba en cómo canalizar
ese deseo de las grandes empresas de aplicar medidas de RSE en aras
del desarrollo socioeconómico de países en desarrollo. La relación
entre las grandes y las PYME de países en desarrollo no debe
fundarse únicamente en la buena voluntad filantrópica de las
empresas sino también en los beneficios mutuos que pueden obtener
ambas partes. Un modo de lograrlo es establecer vínculos
empresariales en los que reconozcan que tienen una responsabilidad
social con el país que les acoge. Más aún, coincidiendo con la
creciente importancia que se da al mercado "moral", cada vez es más
común que las grandes empresas busquen la mejor manera de
contribuir al desarrollo de la economía local.
Más información en inglés sobre el ITC y Ayuda para el Comercio
en:www.intracen.org/AidforTrade
Estudio de caso: Liberalización de los servicios
de turismo en las negociaciones del AAE
Caribe-Europa
En Barbados, la colaboración entre los sectores público y
privado permitió garantizar mejores condiciones para el comercio
del turismo que las ofrecidas por el Acuerdo General sobre el
Comercio de Servicios de la Organización Mundial del Comercio.
El Acuerdo de Asociación Económica (AAE) entre el Grupo de
países de África, el Caribe y el Pacífico, CARIFORUM, y la Unión
Europea (UE) dio lugar a mejores y nuevas oportunidades de acceso
al mercado para los inversores de CARIFORUM y los proveedores de
servicios del sector turístico en el mercado de la UE. Los
resultados de este proceso demuestran que el sector privado de
países en desarrollo, incluso tratándose de economías pequeñas y
vulnerables, puede cosechar importantes beneficios mediante un
enfoque proactivo y una participación temprana en las negociaciones
comerciales.
La cuestiónDesde la perspectiva del sector turístico de Barbados y el resto
del Caribe, la industria turística global se caracteriza por
canales de distribución consolidados y controlados por un número
limitado de grandes actores internacionales, muchos de ellos con
sede en la UE.
A pesar de esta situación, un objetivo clave para los servicios
de turismo de CARIFORUM era garantizar mejores condiciones de
acceso al mercado y la facilitación del comercio, principalmente,
para que pequeños proveedores de servicios de la región pudieran
exportar por primera vez y/o aumentar sus exportaciones a la
UE.
La soluciónAl centro del proceso se situaba la Maquinaria Regional de
Negociaciones del Caribe (CRNM) que se asoció con la Organización
del Turismo del Caribe y la Asociación de Hoteles y Turismo del
Caribe para impulsar la colaboración nacional y regional en el
sector. Los Ministros de Turismo de la Comunidad Caribeña (CARICOM)
y el Consejo de Comercio y Desarrollo Económico de CARICOM apoyaron
a dichos asociados.
Esa asociación creó una nueva entidad -el Equipo Comercial del
Sector Privado de Barbados (PSTT por su sigla en inglés)- a la que
se encargó investigar, documentar y promover aquellos intereses del
sector privado que probablemente se verían afectados por las
negociaciones comerciales internacionales.
El PSTT desempeñó un importante papel de apoyo a la empresa en
el proceso del AAE que incluyó cabildeos, la participación en
consultas oficiales y oficiosas con el Ministerio de Comercio
Exterior, y la coordinación de los sectores público y privado en
los planos nacional, regional e internacional.
Junto con la Asociación de Hoteles y Turismo de Barbados y otras
partes interesadas clave, tanto públicas como privadas, el PSTT
facilitó grupos temáticos para definir las posiciones ofensivas y
defensivas del sector turístico. Luego, elaboró un informe en el
que se destacan aquellas áreas donde los proveedores de servicios
de Barbados manifestaban su interés por obtener un mejor acceso al
mercado europeo y solicitaban la eliminación de barreras
específicas a las exportaciones de servicios turísticos.
Los resultados
- Estipulación de reglas significativas, innovadoras y
de apertura de mercados para el sector.
- Entendimiento común sobre cuestiones que afronta el
sector, sobre todo, en materia de normas y prácticas
anticompetitivas.
- Creación de mecanismos para facilitar a los
inversores de la UE la opción caribeña.
- Fortalecimiento de la capacidad de los operadores de
CARIFORUM para aumentar las exportaciones turísticas y la
competitividad del sector.
Los factores de éxito
- Determinación del sector privado de participar
activamente en el proceso de negociación.
- Uso efectivo de organizaciones de apoyo a la empresa
para formular y transmitir posiciones al gobierno y las autoridades
negociadoras regionales.
- Compromiso manifestado tanto por el Gobierno de
Barbados como por las partes interesadas del turismo del país de
entablar y mantener una relación de trabajo constructiva y
cooperativa durante todo el ciclo de negociación.
- Capacidad de los negociadores de defender con éxito
los intereses de los operadores privados.
Estudio de caso: Asociaciones público-privadas
para la integración de los servicios aduaneros en
Ghana
En los diez últimos años, el Gobierno de Ghana mostró el firme
empeño estratégico de atraer inversiones orientadas a las
exportaciones, facilitar el comercio y mejorar la competitividad
ghanesa. La reforma de los procesos y procedimientos utilizados por
el Servicio de Aduanas, Impuestos Indirectos y Prevención fue un
aporte muy importante en la consecución de esos objetivos.
Reconociendo la importancia del papel desempeñado por el sector
privado en impulsar el crecimiento económico de Ghana, el Gobierno
se propuso forjar una APP que le ayudara a construir, hacer suyo y
poner en marcha el proceso de integración y mejora de sus
operaciones aduaneras.
La cuestiónEn lo que respectaba a las operaciones aduaneras de Ghana era
crucial reducir la duración y mejorar el proceso de documentación y
reglamentación, así como evitar el fraude y aumentar la recaudación
de ingresos.
Tras afrontar las limitaciones financieras y la escasez de
capacidad técnica, y extraer enseñanzas de anteriores proyectos de
gobierno-e que habían fracasado, el Gobierno de Ghana tenía que
crear una estructura asociativa que respaldara los costos,
propiciara la participación de las partes interesadas e impulsara
la aplicación y sostenibilidad de un nuevo sistema automatizado y
los consiguientes procesos.
La soluciónUna prioridad clave del Gobierno de Ghana era capacitar a grupos
del sector privado y asociaciones empresariales para que prestaran
mayor apoyo a la formulación y aplicación de medidas. Entonces,
creó un órgano de coordinación de las diversas asociaciones
empresariales del sector privado y fundó el Ministerio de
Desarrollo del Sector Privado para fomentar la colaboración de los
sectores público y privado con el Gobierno. Además, promulgó una
nueva ley que incorporaba el procesamiento electrónico de pagos y
transacciones.
En octubre de 2000, el Gobierno creó la APP Ghana Community
Network Services Limited (GCNet) y eligió a la Société générale de
surveillance (SGS) como asociado técnico estratégico para que
aportara recursos financieros y competencias técnicas en prácticas
idóneas que apoyaran el proyecto.
La SGS había demostrado su experiencia en un proyecto similar
llevado a cabo con éxito en Singapur. El Gobierno encargó la SGS
identificar y consultar a asociados adecuados para la APP. De ahí
que en la composición de la APP GCNet haya una proporción de 35:65
de los sectores público (Aduanas de Ghana, Consejo de
Transportistas Marítimos de Ghana y Banco Comercial de Ghana) y
privado (SGS y EcoBank Ghana Ltd). Una junta directiva se ocupa de
la reglamentación y supervisión internas de la APP y el Ministerio
de Comercio e Industria de las externas.
Los resultados
- Simplificación de los procedimientos aduaneros.
- Tramitación más rápida de los despachos de
aduana.
- Tránsito más rápido, gracias a un sistema de rastreo
por satélite.
- Aumento de la recaudación de ingresos.
- Mejora de la competitividad y reconocimiento de la
Corporación Financiera Internacional de que Ghana es uno de los
países que introdujo más mejoras en lo que respecta a hacer
negocios.
Los factores de éxito
- Apoyo y confianza del Gobierno en el proyecto.
- Asociados dignos de crédito.
- Creación de su propia infraestructura para resolver
cuestiones esenciales en ámbito.
- Implementación del proyecto por etapas, control de
costos y prestación consistente de servicios de alta calidad.
- Manifestación tangible de la transformación y las
mejoras de los procesos.
- Formación, sensibilización y capacitación
extensiva.
- Capacidad de respuesta a las tendencias y demandas
emergentes.
- Acuerdo sostenible de autofinanciación.
Estudio de caso: Exportaciones pesqueras de Viet
Nam a la CE
Los sectores pesquero y de acuicultura contribuyen en forma
significativa a la economía de Viet Nam. No obstante, entre 1976 y
1992, la producción del sector pesquero experimentó un rápido
deterioro debido a condiciones adversas tales como escasas
competencias en gestión y explotación acuáticas, suministro
irregular y de baja calidad de materias primas para el sector de
procesamiento, deterioro de las instalaciones de producción y poco
conocimiento de los modernos principios de marketing.
Luchar contra esas limitaciones y deficiencias era crucial para
que Viet Nam aumentara sus exportaciones pesqueras y agrícolas
mediante el acceso a los mercados tan reglamentados de la Comunidad
Europea (CE). Dicho acceso se otorga a selectos operadores privados
que cumplen con varios requisitos sanitarios y de supervisión. El
punto crucial es la evaluación de la organización del país y su
capacidad de control de la seguridad en los ámbitos administrativo
y empresarial.
Para lograrlo, Viet Nam estableció una doble estrategia:
- crear un marco jurídico y regulador, ajustando las
normas necesarias para acceder al mercado específico y
- contar con la participación de los sectores público y
privado en inversiones para el procesamiento de los productos,
instalaciones, maquinaria y competencia de marketing que son
motores de competitividad en los mercados globales.
El Ministerio de Pesca y Recursos Acuáticos se ocupó de la
cuestión y en primer término modificó la legislación sanitaria y
mejoró el procesamiento de alimentos de conformidad con las normas
internacionales.
Los esfuerzos estatales y privados, junto con el apoyo técnico y
financiero internacional, redundaron en una mejor capacidad de
control de mercados, seguimiento de la producción e inspecciones
gubernamentales. La Agencia Danesa para el Desarrollo Internacional
es el mayor donante bilateral del sector pesquero y su apoyo fue
decisivo para fortalecer la Administración Pesquera y perfeccionar
el sector privado.
Las empresas del sector pesquero desempeñaron un papel
importante procurando insumos de equipamiento, servicios, procesos
de mejora y organización masiva. A su vez, VASEAP, asociación
profesional independiente, desempeñó un papel crucial en mejorar la
competencia y las buenas prácticas del sector. ONG de operadores
que representaban el 80 por ciento de las exportaciones de pescado
y mariscos de Viet Nam, VASEAP ayudó a mejorar la relación del
sector con el Gobierno recabando y reflejando las opiniones de sus
miembros acerca de las dificultades que las medidas estatales
planteaban al sector.
El éxito de las exportaciones de Viet Nam a la CE fue fruto de
una estrategia planificada y aplicada a escala gubernamental y
empresarial que contó con apoyo financiero de programas de ayuda
internacionales. El proyecto subraya lo que implica para todas las
partes interesadas convertir en oportunidades de negocio, las
dificultades dimanantes de medidas no arancelarias. También destaca
la importancia que reviste la colaboración entre los sectores
público y privado para crear un entorno empresarial que facilite el
crecimiento económico. Todo ello contribuyó a que la competitividad
de las exportaciones pesqueras de Viet Nam mejorara
considerablemente.
Otros estudios de casos en la página Business and Trade Policy
del sitio web del ITC:www.intracen.org/btp